
9 de la mañana. Domingo de diciembre. Hace frío, bastante frío. Y yo estoy plácidamente metido en la cama, hasta que noto que me zarandean, primero ligeramente, y luego con algo más de fuerza. Y aún medio sopa, oigo la voz de mi padre que me dice "¿Te vienes a sacar fotos a la Ulzama?".
Estos días de puente he tenido la suerte de recuperar algo que mi familia y yo solíamos hacer hace muchos años, allá cuando sólo eramos dos hermanos. Las excursiones mañaneras al campo, al monte, o a veces, a la nieve, que se suele decir.
Nos levantábamos pronto por la mañana, y nos vestíamos bastante emocionados, porque para nosotros, que eramos bastante peques, era como irnos de aventura a las junglas amazónicas o a las estepas siberianas. En serio. Y puede que lo más que hiciésemos fuese subir a San Cristóbal, que estaba a 5 minutos de casa, 15 si ibas andando. Pero era como cuando ibas de excursión con el cole, que daba igual que fueras a ver una planta de embotellado, una ermita o las ruinas de la fábrica de armas de Orbaiceta, siempre te ilusionabas cuando tocaba excursión.
Y esa ilusión, aunque parezca mentira, no termina de desaparecer con la edad. No señor. Porque este puente que he tenido la suerte de ir de nuevo de excursión con mi padre (dos veces, una nosotros solos, y la otra con mi hermana pequeña), me he divertido casi tanto como lo hacía de pequeño, solo que sin hacer que el palo que cogía del suelo era una espada o cosas así. Como ambos compartimos la afición por la fotografía, qué mejor que irnos a la zona norte de Navarra, que es tan bonita.
Y entre que no encontrábamos el camino a la selva de Irati y la Marta esa metida en la TOMTOM no ayudaba una miaja, los mil y un pueblos con iglesia a los que mi padre se empeñaba en que sacase foto desde el coche, la niebla densa de la zona de Belate y la Ulzama, el ciervo enamorado que seguía mi hermana por toda la valla y los ecos de los cazadores por el monte, me lo pasé tan bien como de niño, y llené en dos ocasiones la tarjeta de la cámara.
Puedo decir, con orgullo, que me gusta ir de excursión con mi papá.
No hay comentarios:
Publicar un comentario